Así se siente uno condenado por la compañía de la luz, del gas, los bancos y sus comisiones, la administración y sus impuestos, etc. mientras fariseos y saduceos se van de rositas y se lo llevan entero para su bolsa de Roma. Qué bien les viene que no existiera jamás el personaje mítico que han esgrimido como paradigma de amor, paz y salvación. Así se aseguran ellos que no va a tirar de látigo y vaciar su templo de hipócritas mercantilistas que e slo que son.
Así se siente uno condenado por la compañía de la luz, del gas, los bancos y sus comisiones, la administración y sus impuestos, etc. mientras fariseos y saduceos se van de rositas y se lo llevan entero para su bolsa de Roma. Qué bien les viene que no existiera jamás el personaje mítico que han esgrimido como paradigma de amor, paz y salvación. Así se aseguran ellos que no va a tirar de látigo y vaciar su templo de hipócritas mercantilistas que e slo que son.
ResponderEliminarCordial y humano.
Gracias como siempre por tus participaciones e interpretaciones,
Eliminary por dedicar unos minutos aquí.
un placer.